Disponer de un calendario de mantenimiento que nos permita abordar correctamente el manejo del césped y su cuidado, es lo más aconsejable. Así no tenemos que presumir nada, sino que contamos con una hoja de ruta que nos dará excelentes resultados.
Son varias las labores a realizar para establecer y gestionar el césped. Esto requerirá más o menos trabajo dependiendo del tamaño de la superficie a sembrar. En todo caso, sea mayor o menor el área que ocupará el césped, las labores son las mismas. De ellas vamos a conversar en este post.
Labores propias de un calendario de mantenimiento del césped
Son nueve las labores que deben realizarse en un calendario de mantenimiento del césped. Estas acciones son las siguientes:
1. Siembra
La siembra es el proceso mediante el cual implantamos, sobre la superficie elegida, el tipo de gramínea adecuada; de acuerdo al tipo de suelo (arenoso/ arcilloso), condiciones climáticas y uso que va a tener el césped.
La primavera, postrimerías de verano e inicio de otoño son los ciclos estacionales recomendados para la siembra. Es aconsejable elegir la semilla según el destino del césped, si va a ser de sombra o para pleno sol.
Planificar la labor evitará daños, gastos innecesarios de tiempo y recursos. Preparar el suelo es otro paso previo que permite recoger piedras, desechos y acondicionar su nivelación e inclinación.
2. Resiembra en el calendario de mantenimiento
La resiembra es una labor del calendario de mantenimiento del césped muy importante, ya que regenera el césped viejo. Requiere dos pasos previos, la siega y el escarificado.
El corte del césped debe hacerse a 2 o tres centímetros de altura, dejándolo listo para el escarificado. Esta última labor remueve la materia orgánica muerta de la base de la planta y abre la tierra para que la semilla penetre.
3. Plantar tepe esta determinada en el calendario de mantenimiento
El tepe es un césped precultivado que se expende en el mercado en rollos de longitud y anchura determinados. Su época de plantación está determinada en el calendario de mantenimiento del césped.
Plantarlo requiere acondicionar el terreno para la recepción del tepe. Entre estos trabajos está la nivelación del suelo, abonarlo y compactarlo.
El tepe es un producto delicado que debe plantarse al recibirlo, no es aconsejable almacenarlo porque se fermenta. Luego, debe ser regado abundantemente varias semanas hasta que enraice totalmente.
4. Fertilización
La fertilización, actividad enmarcada en el calendario de mantenimiento del césped, es el proceso de aporte de nutrientes. Es una labor de elementos combinados: fertilizantes industriales y abono para césped.
Esta labor se realiza con maquinaria especial que distribuye el fertilizante uniformemente y evita que se concentre solo en algunos lugares, produciendo efectos no deseados.
Un fertilizante equilibrado en la proporción 2-1-2 de los elementos químicos nitrógeno, fósforo y potasio es el ideal, combinado siempre con materia orgánica. Esto devolverá al suelo los nutrientes que las plantas han tomado.
5. Corrección del pH
Otra tarea es corregir el pH cuando sea necesario. Los valores normales para gramíneas van de 5.8 a 7.2, aunque varía ligeramente hacia abajo o hacia arriba si la estación es cálida o fría.
Mantener estable la alcalinidad del suelo es fundamental para que el césped absorba los nutrientes de la fertilización y luzca saludable. La acidez del terreno impide que el césped se desarrolle sano.
Saber si el suelo es alcalino o ácido se determina mediante un test; hay signos que evidencian un pH bajo: el crecimiento de musgo y hierbas invasoras son indicios inequívocos.
6. Escarificación
Todas las labores incluidas en el calendario de mantenimiento del césped son importantes, pero la escarificación es vital.
Es una tarea anticompactación del suelo que aporta beneficios al césped, aunque no es muy practicada en jardines porque necesita maquinaria especial. Así que su práctica se realiza preferentemente en campos deportivos profesionales.
Esta labor consiste en la penetración del suelo con máquinas de cuchillas que giran y a su paso van descompactando el suelo. Esto coadyuva en una mejor absorción de nutrientes y de agua.
7. Aireación
La aireación también se hace con dos clases maquinaria especializadas; se encarga de pinchar el suelo y la otra de sacar bocados. Ambas inciden, más o menos, en descompactar el suelo.
La bondad fundamental de esta labor es la oxigenación del suelo que redunda en un mejor enraizamiento del césped y mayor capacidad de absorción de nutrientes. También aporta la porosidad necesaria para que el agua percole, el riego sea efectivo y no se acumule sobre la superficie formando charcos.
8. Control digitaria preemergencia
La digitaria es una especie de gramínea anual que requiere un tratamiento preemergente para su control, por ser una de las malas hierbas más extendidas.
Esta labor es parte integral del calendario de mantenimiento y debe ser realizada con productos que inhiban la germinación de la especie. El componente activo del inhibidor preemergente es el Etofumesato al 50%.
El momento ideal para la aplicación es iniciando abril, con una dosis de 20 cc por 100 m2 de césped. Y en superficies extensas debe aplicarse una dosis de 200 a 300 L por hectárea.
9. Control de hierbas de hoja ancha
Esta labor de control también es un requerimiento expreso del calendario de mantenimiento del césped, ya que las hierbas de hoja ancha son especies invasoras. Su frecuencia de aparición es anual en los ciclos estacionales de invierno y verano.
También surgen mutaciones que las hacen perennes en algunos casos o bienales. El control de estas especies puede ser químico o mecánico.
10. Control de larvas en el calendario de mantenimiento
Si encuentras en tu césped manchas marrones en primavera o verano, y escarbas debajo de alguna de ellas, te sorprenderá encontrar larvas. Estas son Típulas, y la mejor manera para combatirlas es con insecticida. Los de principio activo de Diazinon son muy efectivos.
Tener siempre a disposición el calendario de mantenimiento del césped nos permitirá lucir un césped sano y de exuberante belleza.
