El compostaje es el proceso por el cual la materia orgánica se trasforma en abono natural para la tierra. Esta materia procede de los seres vivos, ya sean plantas o animales. Si echa un vistazo en su jardín o incluso en su cocina, encontrará restos que les sirvan para hacer un buen compostaje como por ejemplo: raíces, restos de hojas, flores, animales y microorganismos muertos, la piel de las patatas o las cáscaras de huevo…
Beneficios del compostaje
Los beneficios del compost son múltiples:
- Debido a su estructura aterronada facilita la formación de conglomerados del suelo permitiendo así mantener una correcta aireación y humedad del mismo.
- Se trata de un producto natural, sin compuestos químicos y libre de patógenos. En muchos casos actúa como bactericida y fungicida.
- Al ser un producto rico en nutrientes y macronutrientes, se convierte en un excelente abono para las plantas.
- No es necesario adquirir este producto, ya que se obtiene de un proceso muy sencillo que se puede realizar en el hogar.
El Compostador
Aunque el compost puede hacerse en una simple pila de restos orgánicos, resulta más práctico por cuestión de espacio el uso de un compostador, que se trata de la “herramienta” principal para realizar el proceso. Hay muchas variedades de compostadores, incluso usted mismo se puede fabricar el suyo propio. Sin embargo, existen nuevos compostadores de ‘sobremesa’, de dimensiones pequeñas, muy útiles para colocar en su cocina y aprovechar toda la comida de residuo.
Nosotros en nuestra tienda online te ofrecemos estos dos tipos:
- Eco-Worms composter. Pensado para espacios reducidos. De dimensiones 60cm de altura y 42 cm de diámetro, con una capacidad de 30 litros. Además es compatible con gusanos y disponemos de color verde y frambuesa.
- Urban compostadora. Similar al anterior, pero con unas dimensiones más reducidas 40×28 cm que lo hacen ideal colocar encima de la mesa. Su capacidad es de 15 litros. Y posee una tapa hermética para impedir los malos olores.
Material
Para obtener un buen compost lo mejor es utilizar una gran variedad de materiales. Cuanto más triturados estén, más rápido obtendremos el compost. Es imprescindible que toda la materia introducida sea orgánica. En la cocina encontramos muchos residuos de comida que nos pueden ser útiles. También es preferible usar materiales de rápida descomposición como por ejemplo:
- Residuos de la cocina
- Hojas frescas del jardín
- Restos de la siega de césped
- Estiércol de animales de corral
- Malezas jóvenes
Por otra parte, evitaremos estos materiales:
- Ceniza de carbón y de coque
- Heces de perros y gatos
- Pañales desechables
- Revistas ilustradas
- Restos de aspiradora
- Filtros de cigarrillos
- Tejidos sintéticos