El túnel es el sistema de protección de los cultivos más económico. Es fácil de montar y desmontar, y presta numerosos servicios.
El túnel es un accesorio extremadamente simple: algunos arcos metálicos y una película plástica transparente -lo que explica su amplia difusión en las huertas de hoy-. Es útil al principio de temporada para acoger las siembras o los transplantes precoces, permitiendo ganar casi dos semanas en la cosecha. Sobre todo, evita ver a las jóvenes plantas destruidas o dañadas por las heladas tardías. Da también la posibilidad de cultivar plantas frioleras y protege las cosechas en el final de temporada.
El túnel de activación
Este túnel consta de anillos metálicos que se insertan en el suelo. El comportamiento de esta cobertura y su resistencia al viento están garantizados por la tierra, así pues, los bordes deben ser cubiertos cuidadosamente. Las medidas son variables, des de los 3m de longitud por 1,2 de anchura (una altura aproximada de 50cm) o de 3m de longitud y 45 o 60cm de anchura, para la protección de una fila.
Utilización: este tipo de túnel ligero y polivalente se utiliza sobre todo al principio de temporada para proteger las lechugas de las heladas tardías.
El túnel de cultivo
Con la misma concepción que l túnel anterior, este es más robusto, cubierto con una película transparente más sólida y arcos en acero galvanizado para resistir mejor al viento. Las dimensiones son las mismas que el de activación.
Utilización: protege tanto al principio como al final de temporada de las heladas, además defiende a los vegetales durante su cultivo hasta su cosecha.
El invernadero-túnel
Es más práctico y de utilización más cómoda, donde el jardinero puede estar de pie. El gran volumen de aire garantiza una mejor protección de las plantas. El aire, que se calienta durante el día, tarda mucho más tiempo en enfriarse por la noche. Además, en caso de mucho frío, es posible extender una cortina de invernadero para garantizar una protección suplementaria.
Calefacción complementaria por el suelo
Para conseguir un cultivo precoz a principio de primavera, puede recurrir a un sistema de calefacción de la tierra bajo las plantas. Basta con deslizar una placa térmica a una decena de centímetros de profundidad bajo la tierra para mantener una temperatura suave. No es precisa la instalación de un profesional, pero habrá que tener en cuenta la instalación de una conexión eléctrica conforme a las normas.
Utilización: Estas placas son utilizables en todos los túneles, incluso en los dos primeros túneles.
Calefacción complementaria por el aire
También existe la posibilidad de instalar un sistema de calefacción por aire. El más práctico por supuesto, el aparto con termostato. Que nos permite mantener el invernadero o al menos una parte al refugio de la helada.
Utilización: Esta calefacción por aire sólo es posible en los invernaderos-túnel de gama alta, por simple razones económicas.